jueves, 3 de mayo de 2012

EJECUTADO POR ENSUCIAR


Esa sombra fresquita en la cual nos cobijábamos cada vez que cruzábamos por el paso de peatones. Parada obligatoria de los usuarios del Hogar  del Jubilado donde apoyarse, descansar y guarecerse del calor primaveral. Años de compañía, similitudes de crecimiento con mis hijas, lugar de encuentro del personal de limpieza donde (además de trabajar) disfrutaban de los 5 minutos del cigarrito. Cortina preciosa de hojas verdes que escondía los pequeños almacenes de residuos que nadie quiere delante de su puerta.
Después de muchos años de vernos todos los días, has sido ejecutado por orden gubernamental. El Señor Concejal ha decidido que eres culpable de ensuciar. Tus hojas y tus frutos manchan los suelos de la acera y la calzada. Suelos que siempre están decorados por restos de los contenedores adyacentes, por los excrementos de perro, por papeles, colillas y bolsas.  Majestuoso ser vivo que ya no estarás, ramas y hojas que ya no filtrarán los rayos del sol, te has quedado en simple tocón que estropeara el paisaje. En obstáculo con el cual evitaremos tropezar, en simple bulto en la acera que se convertirá en escultura a la estupidez humana.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sin duda, estamos condenados a la estupidez infinita.
Me encanta Carlos.
Laura

Carlos Campos Naharros dijo...

Gracias Laura.
Carlos